Quizás…

♪ Come Away With Me by Norah Jones ♫ 
night  
Son las 3:45am.
No puedo dormir.
No dejo de pensar en ti.
Te extraño.
Me doy vueltas en la cama, quitando las sábanas de mi cuerpo, el simple roce de ellas, me molesta. Me doy la vuelta y abrazo mi almohada, imaginando que es tu espalda. Aspiro su olor, intentando rescatar algo de tu colonia que se ha quedado impregnada en ella. Pero no hay nada, todo es inútil, no queda nada de ti; enojada, aviento la almohada hacia el otro lado de la habitación y se estrella contra la puerta, haciendo un ruido sordo que no se escucha. Suspiro y me resigno a otra noche de insomnio, fijando mi mirada en el techo.
La luz que se cuela por la ventana dibuja extrañas sombras en el. Algunas tan tiernas como mariposas y otras tan fantasmagóricas como los monstruos de los que me defendías, cuando estabas a mi lado, cuanto te importaba...
Cierro los ojos, apretándolos fuertemente, intentando así moderar el dolor que me da el saberte perdido, el saber que ya no regresarás, que nunca más me harás reír, que ya no sabré tus nuevos sueños ni el esfuerzo que harás para conseguirlos; ya no te importa mi dolor mucho menos este amor que siento por ti.
Duele, duele tu ausencia, duele tu silencio, dueles tu.
Abro los ojos y me levanto de la cama, dirigiéndome hacia la ventana, Me siento en el borde del marco y subo las piernas en el; abrazo mis rodillas y fijo mi mirada en el paisaje detrás de la ventana. Afuera está obscuro, solo algunas candilejas iluminan la calle, pero no son suficientes para aportar un poco de luz a mi vida.
Me muerdo el labio, recargando mi cabeza sobre el helado vidrio, mientras veo como las primeras gotas de una llovizna comienzan a caer. El cristal se va empañando lentamente a causa de la tibieza de mis suspiros. Dibujo en la ventana un corazón y observo como se va borrando conforme pasa el tiempo. Así es tu amor por mi, un día estuvo firme, claro, meticulosamente delineado... pero hoy está como ese corazón en la ventana, borrándose lentamente, dejando que algunas gotas de vapor lo traspasen y desdibujen sus líneas. Me siento triste, de pronto todo viene a mi, como si se tratara de una cascada de emociones y recuerdos. Los recuerdos de tiempos felices, las peleas furiosas, las confortaciones plácidas, las intimas caricias, nuestros sueños no cumplidos. De pronto todo esta conmigo, todo tu mundo y el mío se han conjugado en esa pequeña habitación, observándome, burlándose de mi, llorando conmigo, añorándote por igual.
Me siento triste y no estas para consolarme.
Nunca más lo estarás.
Una lágrima comienza a correr por mi mejilla y siento que mi corazón empieza a resquebrajarse mientras un temblor invade mi cuerpo. Al principio creo que es frío, pero pronto me doy cuenta que es el; es mi cuerpo que tiembla de miedo al entender que nunca más volverás a acariciarlo. Sonrió lastimosamente y me limpió las lágrimas que ahora corren por mi rostro. Me froto la cara con las manos, desesperada, dándome cuenta que por más que te sueñe, que te llame, que te extrañe, incluso que te ame... no volverás.
Entonces me abro paso entre los recuerdos y las alegrías pasadas, para meterme de nuevo en mi cama. Me cubro con las sábanas de la melancolía y ahí, en mi refugio personal, te digo que te amo, que no te olvidaré, que siempre recordaré nuestros momentos, que en mi vida tendrás un lugar por siempre. Guardo silencio un momento y dejo que el último sentimiento de angustia y tristeza se apodere de mi alma, la sacuda, la estruje y atormente, para que finalmente la deje ir, malherida pero aun latente, contrariada pero esperanzada, triste pero sin melancolía.
Retiro la sábana que cubre mi cuerpo y abro los ojos.
El sol entra a raudales por la ventana y baña mi cuerpo, dándole un poco de calor y fuerza, apenas la suficiente para poder murmurar- Quizás hoy te olvide, quizás hoy ya no piense en ti, quizás sea este el día en que pueda decirte con tranquilidad "Adiós".
Quizás...

Lia C.

Comments

Popular posts from this blog

Corto en la Madrugada

Maestros&Princesas